Con el objetivo de evitar el trabajo infantil, personal del área de Desarrollo Familiar del DIF Estatal realiza brigadas de supervisión en cruceros y en el centro de la ciudad, y cuando detecta a menores de edad realizando actividades lucrativas, se habla con los padres para sensibilizarlos sobre los riesgos que corren sus hijos en la vía pública.
Así lo dio a conocer la encargada de despacho del DIF Estatal, Nancy Xóchitl Macías Pacheco, quien comentó que esta es una tarea permanente que se realiza a través del programa de prevención de Trabajo Infantil, en el cual se tiene estrecha coordinación con el área de gestión social y la Procuraduría de Protección de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes.
Indicó que por instrucciones de la presidenta del DIF Estatal, Yolanda Ramírez de Orozco, la protección de la integridad de los menores de edad es una prioridad, ya que ellos no deben exponerse a peligros innecesarios.
Comentó que de acuerdo a los informes del área responsable que realiza los recorridos por distintos cruceros, los niños que están en las esquinas, aunque se les ve que están solos, casi siempre hay un adulto que está cerca de ellos vigilándolos.
Mencionó que en todos los casos de trabajo infantil que los colaboradores de la institución detectan, se habla con los padres de familia de los menores de edad o con los tutores, a fin de concientizarlos de que este tipo de actividades no son óptimas para un adecuado desarrollo y crecimiento de los infantes y adolescentes.
Asimismo, refirió que una gran mayoría de los niños que están en los cruceros son hijos de indígenas que están de paso por el estado y provienen principalmente de Chiapas y Oaxaca.
Destacó que entre las actividades más recurrentes en las que se involucran los niños son la mendicidad, el malabarismo, limpiaparabrisas y venta de semillas y distintos tipos de dulces; siempre se invita a los padres a que inhiban estas prácticas, sin embargo son pocos los que verdaderamente se concientizan sobre este problema.
En este sentido, mencionó que mientras la sociedad les siga dando dinero o compre sus productos, será complicado que los menores de edad abandonen estas actividades, las cuales las realizan en la mayoría de los casos con el consentimiento de sus padres.
Agregó que cuando se habla con los padres de los infantes y adolescentes, también se les ofrece el servicio de regularización escolar, el cual se brinda en las instalaciones de Casa Club, en oficinas centrales del DIF Estatal.