PRIMERA PARTE
Eran las 12:30 del mediodía del 12 de mayo de 2012 cuando camino de Aguascalientes a Villa Juárez, Asientos; recibí la llamada de mi hermana Adela. Muy alterada me dijo que una mujer y tres hombres habían sacado con lujo de violencia a mi hermano de su propia casa.
Se habían hecho pasar por compradores de un auto que él vendía. Les abrió la puerta de su casa y le robaron varias cosas. Había sido a las 10:30, mi cuñada, la esposa de mi hermano, le había llamado apenas porque prácticamente los habían secuestrado esas cuatro personas.
Inmediatamente le marqué a la subsecretaria de Gobierno, María de los Angeles Aguilera. Desde el sexenio anterior, con el ingeniero Luis Armando Reynoso Femat, me había atendido de manera correcta en las obligaciones de la organización que represento, la UCD.
Me dijo que inmediatamente iba a pasar ese reporte. La verdad creía que había sido alguien de la delincuencia, en aquellos años había un problema social muy fuerte con extorsiones, ejecuciones y situaciones difíciles en la vida en Aguascalientes.
Temí por la vida de mi hermano. Frené justo pasando Jaltomate, donde empieza el municipio de Asientos, Aguascalientes. Me acompañaba un amigo y colaborador, don Dani, le imprimí velocidad de regreso a Aguascalientes y en el transcurso me llama el general Rolando Hidalgo Eddy, me preguntó qué había pasado; ya éramos conocidos desde el sexenio anterior y le dije: me pasaron esta información de lo que pasó a mi hermano.
Contestó tajante: Me habló la subsecretaria de Gobierno, y le digo lo mismo que a ella, y es que fueron los ministeriales de Felipe de Jesús Muñoz Vázquez, me late porque han estado cometiendo este tipo de cosas.
Llamé a la subsecretaria pero ya no me pudo contestar. llegué a Palacio de Gobierno y en la puerta me recibió la licenciada María de los Angeles Aguilera y me dijo que efectivamente mi hermano estaba en las instalaciones de la Procuraduría de Justicia con una orden de comparecencia y presentación.
La verdad nunca me imaginé lo que vendría más adelante. No imaginé que a la gente de la tierra buena, como es Aguascalientes, le estuviera pasando esto confiando en que son 48 horas y con la idea de que lo iban a retener solo ese tiempo, pero no. Pasó el tiempo, envié algunos abogados y no podían ingresar, no podían saber nada.
Ahi empezó la pesadilla. Lo demás lo narraré más adelante.
Invito, convoco a las personas que han estado en este proceso trágico de tortura en Aguascalientes y que se cuentan por cientos, a unirse a la lucha. El tiempo de justicia ha llegado, para bien, y rápido.
La convocatoria se realizará por los medios y la página que represento en Facebook. Hagan sus comentarios y si alguien se anima a escribir su odisea, angustia, represión y tortura, son bienvenidos. Y si tienen temor de represalias la información que proporcionen será muy confidencial. La idea principal es recabar la información que se requiere, clara y fidedigna para comprobar la mayor cantidad de casos de tortura.
(Continuará…)