La renuncia del Ministro Eduardo Medina Mora a la Suprema Corte es un mal augurio para la democracia y el Estado de Derecho en el país, pues vaticina la búsqueda del presidente López Obrador por hacerse del control del máximo órgano de justicia de la nación, aseveró Fernando Herrera.
Además de darse en una falta clara al Artículo 89 constitucional, dijo el Vocero del Comité Ejecutivo Nacional del PAN, confirma las presiones que ha venido ejerciendo el titular del Ejecutivo sobre el Poder Judicial.
Herrera Ávila precisó que la Constitución es clara al señalar que las renuncias de los Ministros de la SCJN solamente procederán por “causas graves” que serán sometidas al Poder Ejecutivo, como un candado que evite presiones e injerencias.
Sin embargo, dijo, “al momento no han sido expuestas dichas causas y por el contrario, el vacío de información ha dado pie a especulaciones por parte del Presidente de la República, que únicamente vulneran el Estado de Derecho que debe proteger a todos los mexicanos”.
Por otra parte, el aguascalentense señaló que el Presidente López Obrador ha mantenido una confrontación pública y permanente con los integrantes del Poder Judicial por temas como la Ley de Remuneraciones y los amparos contra la construcción de la Base Área en Santa Lucía, entre otros temas.
“Para Acción Nacional existe una clara estrategia del gobierno morenista para debilitar las instituciones y los contrapesos en el país, y hacerse del control de los Tres Poderes de la Unión”, expresó.
“Por ello hacemos es un llamado para poner frenos a lo que podría derivar en un gobierno autoritario. Esta renuncia es sin duda un mal augurio. México necesita instituciones fuertes y poderes autónomos, independientes y con equilibrio”, añadió.
El vocero del CEN panista recordó que las presiones del gobierno federal para “quitar del camino” a quienes les resultan incomodos, han quedado documentadas con casos como la renuncia de la ex presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, Janine Otálora; así como de los titulares de la Comisión Reguladora de Energía y el Coneval.
“En paralelo, lo que hemos visto ha sido la búsqueda de colocar afines en todos los niveles de gobierno, en los órganos autónomos y en el resto de los poderes; para construir un régimen en el que sólo exista la palabra del presidente”, sentenció.