Por Reina Ávila de León
Aunque la Conapred y la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) avalan que niños y jóvenes puedan ir a la escuela con faldas, zapatillas, cabello largo y de colores, en caso de los varones que desean romper las reglas o sencillamente se identifican con el género opuesto al que tienen biológicamente, pero eso no puede ser porque los padres de familia no están de acuerdo y las reglas siguen siendo las mismas: uniforme de acuerdo al género, cabello corto en hombres y bien peinado en mujeres.
Lorena Martínez Rodríguez, titular del Instituto de Educación de Aguascalientes (IEA), aseguró que las cosas deben de ser tersas para que los padres de familia no se sientan atacados y menos sentir que su hijos están inseguros con este tipo de vestimenta y adornos en la escuela.
Por eso es que trabajarán al respecto para que se lleven a cabo algo similar con lo que en su momento fue la escuela para padres, sólo que ahora más modesta, porque no hay los mismos recursos de antes.
La sociedad evoluciona y también las maneras en que se deben de tratar a los hijos, entenderlos y educarlos, de acuerdo a los valores familiares, pero no a base de regaños y de imposiciones, sino desde la comprensión, aceptación, cariño y aceptación hacia todas las personas, pero sin que esto les cause algún problema de identidad o de incomprensión entre los progenitores.
