Las herencias generalmente son motivo de conflicto y en ocasiones las diferencias llegan al punto de que se asesinan entre hermanos y según la Fiscalía Especial Regional todo indica que la muerte, por disparos de escopeta, del sacerdote Juan Angulo Fonseca, de la parroquia del Valle de Guadalupe, en Atotonilco el Alto, Jalisco se debió precisamente a causa de unos terrenos y fue perpetrada por su consanguineo.
Los hechos ocurrieron el pasado día 10 de este mes y fue cuando el sacerdote platicaba con unas personas que de pronto apareció un hombre encapuchado y le realizó varios disparos por la espalda al clérigo, para luego darse a la fuga en una motocicleta.
Lo que ha informado la Fiscalía Regional es que en la familia de Juan Angulo Fonseca había conflictos familiares por la herencia de unos terrenos y al no poder llegar a una solución entre los hermanos, uno de ellos decidió asesinarlo.
Mientras el sacerdote ya fue sepultado, las autoridades siguen realizando las investigaciones y localizando al principal sospechoso para detenerlo, de comprobarse que es el autor material de la muerte, fincarle las responsabilidades jurídicas que correspondan-
(Con información de Agencias)